Parque Nacional de Las Torres del Paine

Estas palabras del gran escalador italiano convierten en casiimprescindible la visita a este rincón tan especial de la Patagonia que cautiva
por su variedad paisajística, rodeada por imponentes cordilleras, vastos
bosques y glaciares infinitos.
La ruta que proponemos aprovecha al máximo este inolvidable enclave: desde
el norte del macizo, que es el corazón del parque, caminaremos hasta el Glaciar
Dickson, atravesaremos el Bosque de Perros, el Paso John Garner, el Campamento
el Paso. Lugares que permanecerán para siempre en nuestros recuerdos. Si
tuviéramos que recomendar un viaje, éste sería sin ninguna duda.
El Parque Nacional Torres del Paine tiene una extensión comparable a la
mitad de la Comunidad de la Rioja. Se halla en la pura punta del cono sur de
América, allá por la Patagonia Chilena. En los años 30 se bautizó a este mítico
rincón de la Patagonia como Parque
Nacional del Sur. Con el paso del tiempo, las fronteras de este Parque
crecieron y su nombre cambio al actual.

A día de hoy posiblemente sea el
Parque más visitado de Chile, a pesar de su lejanía de todo, incluso de los
mismos Chilenos que tienen que desplazarse más de 2.000 km desde su capital,
Santiago, para poder visitar estas latitudes australes. desde España serían
casi 14.000 km. guau!
Además, su clima inestable incluso en verano, hace desistir a muchos a la
hora de visitar lo que posiblemente sea uno de los lugares más espectaculares
del planeta. Por lo tanto hay 3 factores importantes que hacen que la Patagonia
sea aún en nuestros días una tierra por explorar: Su lejanía, clima inestable y
la época en la que se debe ir, que suele ser de diciembre a marzo, fechas
complicadas a la hora de hacer viajes largos para cualquier europeo. En
realidad, gracias a estos 3 factores, la Patagonia sigue tan auténtica como
siempre.
Hay varias formas de llegar a este Parque de la Patagonia. Quizá la más
lógica sea entrar por Buenos Aires y tomar otro vuelo a El Calafate (Argentina),
conocido por su imponente Glaciar Perito Moreno, al cual se puede acceder sin
ningún problema por una carretera que ha hecho de él, el más visitado de toda
la Patagonia. Desde El Calafate, población situada junto al Lago Argentino y en
medio de la pampa, se accede a Torres del Paine en unas horas por carretera,
teniendo antes que tramitar los papeles de la frontera Argentino-Chilena.

Una vez en el Parque existen múltiples opciones para visitarlo y
dependiendo del interés, se puede permanecer en él desde unas horas a varios
días. Nosotros como amantes de la naturaleza no tenemos ninguna duda en que ya
que se visita, se permanezca en él, el mayor tiempo posible, para impregnarse
bien de todos sus rincones y la belleza que descubriremos en ellos.
Muchos piensan que ya que se va tan lejos, hay que conocer cuantos más
lugares mejor y esto sería lo ideal, pero para conocer bien muchos lugares de
la Patagonia se necesitarían meses de viaje y eso es algo utópico para la mayoría.
Por lo tanto no tenemos ninguna duda en recomendar a los viajeros, que se
esmeren en conocer bien los lugares, pues los más bucólicos y solitarios,
auténtico sello de la Patagonia, se encuentran alejados de los puntos
principales del turismo convencional. Creemos que sería un error ver muchos
lugares de la Patagonia en poco tiempo, pues no íbamos a conocer el auténtico
significado de estas latitudes.
Esta teoría, habría que imponerla a Las Torres del Paine, es decir para que
ir a un lugar tan lejano si vas a llegar, sacar unas fotos e irte. la Patagonia
no es para hacer este tipo de turismo y el Parque Nacional Torres del Paine
menos aún. Es mucho más auténtico conocer pocos lugares pero bien, que muchos
pero mal vistos y no ser capaz más tarde de recordar los lugares a los que
fuiste, teniéndote que valer de las fotos para tratar de recordarlos.

Hay gente que visita por unas horas este Parque, otros que permanecen 1 día
o dos, otros 3 o 4 y muy pocos, realmente pocos, son los que se aventuran a
circunvalar este gran Macizo del Paine. Estos últimos sin ninguna duda serán
los premiados y los conocedores de la auténtica Patagonia, aunque solo hayan
caminado por este Parque y no hayan ido a otros, conseguirán la visión de la
Patagonia más auténtica que se pueda obtener.
Para circunvalar este macizo se necesitan de 8 a 12 días, dependiendo de la
prisa que te quieras dar en recorrerlo. Para caminar una media de 7 horas
diarias y explorar algunos de sus valles donde no hay senda, lo ideal son 12
días, merece la pena pues al acabar el recorrido sabes perfectamente donde
estás y donde has ido, haciéndote una idea en tu cabeza muy real de las
particularidades del Parque, con sus lagos, ríos, bosques, picos y glaciares.
Este gran recorrido se puede hacer prácticamente entero en refugios, solo
son 3 noches las que, al no existir albergues, se tendrán que pasar en tiendas
de campaña, posiblemente sean las 3 noches más espectaculares!

Los refugios a día de hoy son bastante cómodos, todos con sus duchas de agua
caliente, habitaciones de 2 hasta 8 huéspedes, salas de descanso, construidos
en madera y en lugares clave con vistas de película como por ejemplo el refugio
Dickson junto a un inmenso lago de origen glaciar y en los mismísimos
contrafuertes del Campo de Hielo Sur, una extensión de 300 km. de hielo a la
que los gauchos llaman "La Pampa
Helada".
Refugios como el Grey junto al lago que lleva el mismo nombre y donde
flotan a la deriva grandes témpanos de hielo que se derrumban del inmenso
glaciar Grey, cuyo frente muere en este gigantesco lago del Parque son
impresionantes.
Refugio de igual belleza también es el llamado Paine Grande junto al lago
Pehoe, de rabioso color turquesa y en la base de la Punta Bariloche, una de las
4 cimas del Cerro Paine Grande de 3.050 m y solo ascendida 3 veces en la
historia, la última en el 2011 y fue la primera ascensión invernal a este
misterioso pico de la Patagonia Chilena muy cerca de la costa del Pacífico.

Una de las cosas que más sorprende a los visitantes del Paine es que a
pesar de que los picos no son muy altos, casi todos ellos se ven enteros, desde
su base, desde el nivel del mar, por lo que divisar una montaña de más de 3.000
m. es siempre sobrecogedor por su inmensidad y por esos merengues blancos de
hielo que adornan sus cumbres.
Otros refugios del Parque son: Los Cuernos, en la orilla del lago
Nordenskjold y justo en la base de esta mítica montaña de la Patagonia, que
posiblemente hayamos visto alguna vez en alguna revista de viajes o documental.
o el Refugio Chileno en el Valle Ascencio, desde el cual se accede al mirador
de las 3 Torres, que dan nombre a este Parque y que deja sin aliento a todos
los que se dignan a llegar a este aislado mirador.

Para rizar el rizo recomendamos algunas otras caminatas dentro del Parque,
como llegar al Mirador del Glaciar Dickson, el Valle Puma con su glaciar de
montaña, el desconocido Valle Bader, existe, ¡Es un mundo de piedra! O las
bellísimas vistas de la cordillera desde la Laguna Azul, posiblemente la mejor
vista de las Torres del Paine. En estas andaduras lo normal es no cruzarse con
nadie, poca gente sabe aún de estas opciones que posiblemente sean las más
interesantes. Si ¡es cierto! Cuanto más tardes en llegar, más solitario será tu
destino y también más exquisito.
Todavía no hay buenos mapas de la Patagonia, aunque por lo general los
senderos están bien señalizados. No obstante, a la hora de circunvalar el
macizo completo, conviene llevar un guía que conozca la ruta por posibles
imprevistos. El Parque sobre todo en su vertiente norte es muy solitario y
perderse o lesionarse puede generar momentos de nervios y confusión, creando la
posibilidad de desorientación, con todos los problemas que esto puede conllevar
en un lugar tan extremo como este. Además es tal la cantidad de accidentes
geográficos por los que se pasa, que sería una pena no saber que río estás
vadeando, en que lago te encuentras, cual es ese glaciar que emite ese gran
fogonazo de luz, el nombre del bosque tan anárquico por el que transitas o cuales
son esa variedad de picos que se ven en el horizonte, algunos con inverosímiles
paredes verticales de granito y otros adornados por esos merengues de hielo tan
irreales. Un guía hará esta travesía más segura y te explicará cada lugar por
el que transitas.
El recorrido está al alcance de muchos, es solo proponérselo y motivarse
con esta aventura, es bueno desarrollar un respeto hacia ciertos lugares tan
carismáticos como Himalaya o Patagonia, pero no es bueno infravalorarse y
pensar que ciertos sitios son imposibles, pues nos cerramos puertas sin razón a
lugares que jamás olvidaremos por su inigualable belleza.

Nos despedimos con esta frase que estamos seguros muchos de vosotros
habréis sentido alguna vez:
Los caminos del mundo son incontables, y la mayoría deben
ser recorridos.
Tú caminas tras los pasos de la mayoría, hasta llegar
donde los caminos se dividen:
Uno es seguro y luminoso y el otro sombrío y cansador.
Aún así tu mirar sigue adelante el solitario camino,
porque el solitario camino es irresistible.

Enlaces a videos:
Diciembre 2010:
http://www.youtube.com/watch?v=c_O0EJiDDJw
Diciembre 2011:
http://www.youtube.com/watch?v=ezYRfs1UkFw
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